Soy música, fogón de poesía, luminosa oscuridad, palabra, esencial melodía. Soy el que observa y no el observado. Shiva y Tonatiuh son el uno.
lunes, 23 de julio de 2018
A Sylvia Plath.
Puse la punta del pie en la poesía aceitosa de Sylvia Plath.
Pedazo de ébano en un bistec saladísimo en la mesa de
lluvia y relampagos.
El ostión era un ojo abierto: un suicidio de hojarasca que
cesó su aliento.
Alma enfermiza, trémula.
Marea de aguas malas incendiaron
sus tejidos.
Y los órganos fallaban y fallaban, y no se echaban a
andar
en la vida.
La poesía es responsable:
Poesía asesina de espita de gas
suicidio eterno.
Tardío reconocimiento a esta alma embrollada en sus
dudas.
Diosa en el Templo de las Compasiones:
No quedó mucho que matar más que un jirón de alma
salvaje hoy inolvidable.
JC
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario